miércoles, julio 13, 2005

À bout de souffle

Así es cómo me siento yo estos últimos días, sin aliento y sin ganas de hacer nada...

Pero no era de eso de lo que quería hablar hoy, sino de la película de Jean-Luc Godard del mismo título que volví a ver ayer por la noche en la tele local. Y qué recuerdos me trajo!

La primera vez que la vi fue en la biblioteca de la universidad, justo al principio de la carrera hace ya casi 10 años. Yo acababa de llegar a Barcelona a estudiar y todo me parecía emocionante, y esa película fue una de las primeras que me agitaron los sentidos y que me metieron las ganas de hacer locuras en la cabeza.

Luego vinieron muchas otras, pero para entonces yo ya había decidido que quería acariciarme el labio como Pierrot-Laszlo Kovacs, vivir la vida como Patricia la americana en París, y ver el mundo con unas gafas como las de Godard. Y así fue cómo a la mínima oportunidad que tuve me fui a estudiar cine en la ciudad de Kafka, y me dediqué a vivir la vida bohemia hasta que el cuerpo dijo basta. Y así acabé viviendo permanentemente en mi maleta roja y convirtiéndome en una desarraigada profesional, que no hay manera de tener el culo quieto, oye.


"tantas, tantísimas burradas he hecho que me faltan dedos para contarlas!"

3 comentarios:

susej dijo...

Eso es señal que necesitas vacaciones, ánimo que como dijiste ya queda poco.

¿tantas burradas?, bueno tienes los dedos de los pies para contar también, y si no, te presto los míos.

oria dijo...

Susej me ha hecho recordar una canción pero es muy mal sonante, solo te cuento la conclusión... suman 23.

Da igual las burradas que hayas hecho si crees que no has herido a nadie y como dice el refranero castellano:

"Ande yo caliente, riase la gente"

lulu on the bridge dijo...

Oria, no me refería a ese tipo de burradas (o no sólo a ésas ;-))... ah, y normalmente la que sale escaldada soy yo, pero de todas formas no me arrepiento.

Y sí, me muero por unas vacaciones, que en los últimos 15 meses sólo he pasado 15 días en España y esta vez necesito máááás!!!

Un beso a ti también, Hierofante!